Tras la algarabía de la victoria obtenida el domingo pasado contra los Kansas City Chiefs, el lunes se tornó en nostálgico para algunos aficionados.
Dos jugadores de equipos especiales se ven obligados a finalizar su temporada y muy seguramente su época como bengalíes al inicio de la semana 14 de la temporada por circunstancias muy distintas, sin embargo, se van por la puerta de adelante.
El primero se ellos es Kevin Huber, quien fuera pateador de despeje para el equipo felino desde 2009, y desde aquella época ya era un favorito de la afición, que lo vio pasar de su época colegial con la Universidad de Cincinnati, al equipo profesional de la ciudad.
Desde entonces, Huber desempeñó con efectividad su participación en el equipo, siendo uno de los jugadores más regulares salvo el tiempo que permaneció marginado del equipo por una lesión en la quijada, sufrida por un muy cuestionable golpe por parte de los equipos especiales de los Pittsburgh Steelers.
Sin embargo, 2022 no ha sido el mejor año para Huber, quien a sus 37 años, y a pesar de conservar su buena colocación, le ha faltado potencia; situación que obligó al coach de su unidad, Darin Simmons a llamar a Drue Chrisman de la escuadra de practicas, con muy positivos resultados, y tras ser elevado de esa posición en más de 3 ocasiones, el reglamento obliga al equipo a otorgarle un sitio en el roster definitivo, por lo que tomará el puesto de su antecesor, mismo que fue puesto en libertad por la organización.
Si bien no es oficial que Huber haya jugado su último partido vistiendo el jersey de tus Bengals, es muy poco probable que sea incluido en el equipo de prácticas y tras ello, ser elevado para disputar un juego, por lo que es muy probable que el retiro esté en las posibilidades del pateador.
Por su parte, Brandon Wilson muy probablemente no volverá a vestir el uniforme felino, toda vez que tras haber abandonado la lista de jugadores físicamente imposibilitados para jugar, los Bengals no lo activaron en la ventana de 21 días para poder regresar al roster, por lo que será revertido a la lista y aunque podría llegar a un arreglo con el equipo, tendrá que esperar hasta la próxima jugada para participar en algún juego, por lo que las probabilidades de verlo enfundado como un Bengal son demasiado bajas.
Con ello, se cierra de manera inesperada la era de dos jugadores de equipos especiales que dieron satisfacciones a la afición y que sin duda serán recordados en los años por venir.
WDNE
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